El gran templo de Philae está dedicado a Isis, la divinidad femenina tal vez más universal y amada a todo lo largo de la historia egipcia. De forma generalizada, para los Antiguos egipcios la diosa Isis representaba la mujer, la vida y la magia; pero muy especialmente para aquellos sacerdotes iniciados que se consagraban a su culto, Isis era la diosa de la Sabiduría que atesoraba los arcanos Misterios de la Naturaleza.
En Philae encontramos a la diosa Isis fusionada con la diosa Hathor, la «gran Madre cósmica», portando sobre su cabeza el dorado disco solar entre los plateados cuernos de la luna.
Durante la práctica de Bioenergética Universal, nos adentraremos a las capas del Divino Femenino y al finalizar, nuestros sentidos quedarán embriagados con una dulce sensación de belleza, de nostalgia y de serena quietud…
Es la melodía de la eternidad que todavía susurran las piedras en Philae, el gran santuario de la diosa Isis… la «Señora de la Vida», un bello lugar al que los antiguos peregrinos llamaban «la perla del Nilo».